SeccióBurumb@lla

Més que un barri, més que una falla, un sentiment

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Si, este año también.






En esta entrada y justo al contrario de como lo hacemos normalmente, empezaremos por el final.

Domingo, sobre 22:00 sentados ya en nuestro rincón después de muchas horas de trabajo, se nos acerca una persona (nueva, todo hay que decirlo) y nos dice: "GRACIAS" 7 letras que pocas veces, por no decir casi ninguna, nos habían dicho hasta ahora. También manda cojones que nos la tenga que decir una persona que solo nos haya visto en acción durante un fin de semana, pero es un detallazo y que sienta muy bien.

Siempre hemos dicho que no esperamos nada a cambio, pero tampoco vamos a negar que una palmadita en la espalda viene bien de vez en cuando, aunque seguramente nunca nos hayamos merecido ese reconocimiento y por eso nunca (casi nunca) había llegado por parte de alguien que se sienta más allá del rincón. Así que ese momento lo guardaremos bien porque no sabemos cuando se volverá a repetir.

Pero tampoco nos vamos a poner filosóficos así que vamos a contar lo que dio de si uno de los fines de semana más especiales del año. Decir antes que nada que el curro que durante meses se ha pegado alguno de nosotros ha sido directamente una puta barbaridad, con sus momentos buenos, más buenos y espectaculares pero casi nunca malos. Después de horas en la secta tocaba trasladarse al Coliseo, a la Nau, a Vamasa o como queráis llamarlo. Desde el lunes más curro y sobretodo muchas más ganas de que llegara el sábado. Y por fin, después de una noche del viernes larga, llegó.

A eso de las 20:45 ya estábamos vestidos de falleros (como nos gusta, joder) por la secta y preparados para empezar el pasacalles. Cervezas, cubatas, cervezas, risas, cubatas, algún bocadillo, cubatas, algo dulce, cerveza... y así hasta las 23:00. Alguno llegó bastante perjudicado, pero llegó que es lo importante. Una vez empieza el acto miraras para donde miraras había alguno de nosotros haciéndose cargo de algo para que todo saliera perfecto, desde Mister Cortinas al Foquero y claro, algo controlado por un grupo de borrachos y vagos como puede salir? Pues PERFECTO!! Del acto más allá de lo que todos recordarán nos quedamos con 2 detalles de 2 personas que estaban viviendo un momento especial (una acababa y otra empezaba) y se acordaron de nosotros. "Eixa gent que treballa i fa festa al mateix nivell" i "Eixe grup de jovens en els que la festa està asegurada i que tots sabeu qui son" Una de las conclusiones de la noche es que, si, este año también es Burumballa la FM!

Acaba el acto y nos vamos para la secta. Si alguno había llegado a La Sirena perjudicado más de uno casi tiene que hacer parada en el ambulatorio antes de llegar. Comemos algo, seguimos bebiendo y empieza una de esas noches que recuerdan a los viejos tiempos. A esas noches en las que se nos pasaba las horas sentados en la secta bebiendo y riendo como si estuviéramos locos. Alguno de nosotros se fue a la Joy (siempre será la Joy), pero contaremos lo que vivieron el grupo que se quedó. Seguimos bebiendo, bueno alguno empezó porque después de estar toda la tarde sin probar una gota de alcohol se bebió en 2 horas 3 botellas de champán. Visita a McDonald para matar el hambre con intento, sin éxito, de escuchar por el micro del McAuto: "Visca la Falla Parc Sant Roc" y de vuelta a la secta. Entonces llegó el verdadero recital. Una guitarra que aparece no se sabe muy bien como, porque llevaba 7 meses en la oficina y de repente estaba en manos de uno de nosotros, y empieza un concierto íntimo y personal. Así entre canciones e intentando solucionar los problemas falleros de todo el pueblo se nos pasó la noche. Os juro que por un momento llegamos a hablar sobre temas transcendentales en el mundo de las fallas de Silla. Si, con el depósito medio lleno y debatiendo sobre algo que afecta a las 6 comisiones, así con 2 cojones. Y así hasta las 07:00. Después de dudar si irnos a la capital a ver fallas decidimos irnos a dormir y hasta el domingo a mediodía desaparecimos en combate.

El domingo más de lo mismo aunque con un bajón en el nivel y es que el cuerpo ya no estaba para bromas, pero volviendo a currar como el sábado. Y una vez de vuelta a la secta y con las existencias de nuestra mesas bajo mínimos llegó el momento que os contábamos al principio.

Así pasamos el que para muchos es el mejor fin de semana del año y en el que volvimos a demostrar que no es que nos guste currar, es que necesitamos currar para estar de fiesta.

S/B: Siempre estarás en nuestro rincón